Salió Fernando. No podía ser de otra manera. El mal rollo que provocaba era ya insostenible y la tensión no podía soportarse más. Fernando será recordado por ser uno de los concursantes más nocivos de la historia de este programa; se ha dedicado a ir metiendo mierda entre todos sus compañeros y mentiría si no reconociera que en ocasiones lo ha hecho realmente bien. No pudo evitar los chismes ni en su última fiesta. Durante la madrugada del miércoles Fernando nos dejaba ver el verdadero rostro de Rodrigo, muy diferente al que muestra habitualmente. Ambos hablaban del deseo mutuo por la expulsión de Bárbara. Llegaron a decir que si se salvaba, era porque la youtuber gozaba de un apoyo 'costeado' por su familia.Hicieron un ridículo espantoso que choca si tenemos en cuenta que son errores también cometidos por concursantes de ediciones muy anteriores a esta.
Me dí cuenta al observar la conversación entre estos dos del gran papel que está interpretando el amigo de naranjita. Solo hay que tener un poco de memoria para recordar que Rodrigo cambió de manera radical tras la expulsión de Candelas, justo cuando se percató del apoyo que Bárbara tenía por parte del público. Antes de esa eliminación tan esperada por ellos, ya que gracias a la misma podían intuir si la audiencia apoyaba a la mayoría, Rodrigo hablaba de una manera muy distinta a la actual: a estas dos (Bárbara y Adara) se las van a follar una tras otra. El 70 por ciento es de Bárbara y la otra (Adara) se la van a follar en cuanto salga nominada. Resulta extraño imaginarse esta declaración en boca de Rodrigo, ahora que parece no haber roto un plato, pero lo cierto es que este concursante participó en aquellos aquelarres en los que Adara y Bárbara eran centro de todo tipo de críticas. Explico esto porque durante esta madrugada, Rodrigo dijo algo que me hizo volver al pasado y caer en la cuenta de que no está siendo sincero: A mí el público me aplaude desde que fui al piso. Se refería al apartamento. Es evidente que es consciente de que su paso por el apartamento junto a Bea le ha hecho ganar puntos, probablemente por eso no termina de lanzarse con ella a la piscina. Porque no le gusta del todo pero sabe que estando a su lado tiene el camino mucho más claro para llegar a la final. Porque él es el que mejor está leyendo el concurso, y por eso dejó de atacar a Bárbara y a Adara cuando salió Candelas. Por el mismo motivo está dosificando su relación con Bea, una unión que seguramente encontrará su momento más dulce cuando él salga nominado por primera vez. No sería extraño esto último si caemos en la cuenta de que el mismo Rodrigo le aconsejó a Meritxell declararse a Alain cuando estuviera nominada.
Lo tiene todo medido y pensado. No quiero decir que sus sentimientos por Beatriz no sean auténticos; de hecho, él siempre apostó por ella y jamás se separó de su amiga aún cuando la audiencia decidió expulsarla, pero también es verdad que siempre ha pensado que la salida de la valenciana vino bien para que ella pudiera limpiar su imagen y hacerlo mejor en su segunda oportunidad. Lo ha dicho en la casa: la gente te valora más desde que volviste a entrar. Son estas pequeñas frases las que están delatando su juego, muy secreto todavía y solo visible para los que se fijan en los detalles. Una estrategia que probablemente han adoptado los familiares de ambos concursantes. No nos olvidemos que su madre aparece en escena desde que su historia con Bea está yendo a más para decir abiertamente que está encantada con ella: Me encanta esta chica porque es muy buena de corazón. Si es choni, vivan las chonis y yo la primera. Choca que el hijo de una mujer aparentemente tan abierta y con tanta empatía tenga tantos prejuicios en sus relaciones, a no ser que lo de su historia sea algo ficticio para contentar a gran parte de la audiencia. Algo que está consiguiendo, sin duda.
La popularidad de ambos participantes está creciendo a pasos agigantados en redes sociales y Bea tiene el doble de seguidores que cuando salió nominada por decisión propia hace ya tres semanas. Si se expusiera hoy a juicio con Rodrigo de la mano, lo tendría muy complicado el tercer nominado. Ambos han logrado formar un tándem sólido que seguro les permite llegar lejos. Algo muy lícito pero que no me transmite ninguna confianza.
Otro de los protagonistas de la noche fue Miguel. El juego se le va de las manos. Reconozco su continuo teatro me hace reír. Es imposible no hacerlo ante una interpretación tan apoteósicamente ridícula. Al escuchar que el público aplaudía a Adara, Miguel decidía apuntar hacia Bárbara y dejar a la novia de su 'henamorado' dentro del club. Una lástima que ella no se molestara en discutir para poder darle el punto extra a Bárbara. También es verdad que los otros dos no hubieran dado su brazo a torcer. Lo peor de todo es que tenemos que seguir soportando a Noelia en la casa.
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