CAPITULO 15- NUEVA VIDA

Me quedé a dormir en casa de Carolina, a mi madre le encanto la idea, estaba más feliz, seguía sin olvidar a Samuel pero me tenía que hacer a la idea que ya no estaba en mi vida. A la mañana siguiente me iba a presentar a su grupo, habíamos congeniado muy bien, era como si nos conociéramos de toda la vida, sus padres también era muy amable la verdad. Me alegraba de haberla conocido, así tendría distracción en Madrid, además me gustaba la idea de compartir instituto con ella.

Desayunamos, y fuimos rápidamente a que me presentara a los chicos, quedaron en una cafetería.

- Buenas chicos esta es Victoria

- Buenas, uno a uno se fueron presentando.

- Hola soy Nuria, encantada.

- Hola igualmente.

- Me llamo, Isabel.

- Hola soy Natalia, encantada.

- Y finalmente se presentaron los gemelos, hola soy Jesús – se agarro a Carolina ese debía ser su novio, después se dieron un pico, no cabía duda era él.

- ¿Y tú, cómo te llamas? – le dije al otro gemelo, estaba en Babia, ¿en qué estaría pensando?.

- Ho-ho-hola me llamo Cristian, dijo dubitativo, estaba ensimismado mirándome- para quitarle el mal rato decidí darle dos besos-.

- Le pasa algo, nunca se había puesto así, el no es tartamudo ni nada, me dijo al oído Carolina, mientras su novio le daba besos.

NARRA CRISTIAN.

Victoria, era una diosa, no podía dejar de mirarla, era tan guapa, me costaba dirigirle la palabra, pero sentía que necesitaba conocerla más, Carolina y mi hermano, se dieron cuenta de algo, nunca me había puesto así, me gustaba eso estaba claro, todos creían que no me iba a pasar nunca, mi hermano ya llevaba tiempo con Carolina, y yo nunca había tenido novia, pensaba que era secundario, y fue llegar Victoria, y en un segundo todo ha cambiado.

NARRA VICTORIA

Estuvimos un rato hablando, notaba a Cristian muy raro, era el que menos hablaba, nos fuimos al baño Carolina y yo, y allí me conto cosas de Cristian, la verdad era muy guapo, pero sabía que nunca me podría enamorar de él, Carolina me decía que sentía que le había gustado Cristian, que nunca se había puesto así, pero le dije, que yo seguía amando a Samuel, que yo con él había terminado, por lo que paso, pero de no ser por eso seguiríamos juntos seguramente.

Las chicas, me preguntaron si tenía novio, yo le dije que no, según me dijo después Carolina, sonrió en ese momento, desde ese momento Cristian, estuvo más hablador, de hecho después me acompaño a casa y todo, muy caballerosamente. Carolina estaba mientras tanto con su cari, vamos muchas veces creía que lo hacían allí delante, mia que habilidad, besándose no paraban ni para respirar, cuando los veía a ellos yo me ponía triste, me recordaba a Samuel y a mí.

- ¿Entonces no tienes novio? ¿pero pretendientes si tendrás muchos no?

- No te creas, bueno novio tengo y no tengo, es una historia muy larga, mi novio era el hijo de la pareja de mi padre, por eso estoy aquí, éramos felices, pero mi padre no aprobó nuestra relación, te lo cuento, pero no lo cuentes de momento, solo lo sabe Carolina, y tu hermano a lo mejor.

- Bueno pero si no hubiera pasado eso no estarías aquí conmigo, ¿no?

- Sí, pero me gustaría estar con él, lo quiero lo amo, todavía no lo he olvidado.

- Seguramente lo olvidarás.

- No lo sé

Al enterarse, le volvió a cambiar la cara. Invite a carolina a mi casa, y ella acepto, los gemelos no quisieron.

- Carolina como sigas así, vas a dejar sin aire al chaval, todos rieron. Y cerré la puerta

- ¿Ya he visto que te llevas muy bien con Cristian no?, creo que le gustas.

- Estás loca, no creo, -yo sabía que si, pero no quería que se diera cuenta.

- Jajajaaja, le he contado lo de Samuel. Y le ha cambiado la cara.

- Pobre, nunca ha tenido novia, es mas pensábamos que no se iba a echar nunca una.

- ¿Ah no?

- No, Victoria ¿te interesa?

- No, para nada, sigo muy enamorada de Samuel, no lo olvido.

- Normal solo ha pasado un día,

Al momento, sonó mi teléfono, era Laura. Me metí, al baño no quería que Carolina, escuchase la conversación.

- Laura, ¿Qué tal tía?

- Bien, muy bien ¿y tú?

- Genial he conocido a gente nueva, tengo a una chavala que hemos congeniado muy bien, se llama Carolina, y ya me ha presentado a sus amigos.

- ¿y has conocido a alguien interesante, a algún chico?

- Chicos hay dos, son gemelos uno es el novio de Carolina y otro me ha tirado los tejos, es muy guapo, pero siento que estaría traicionando a Samuel, ¿sabes algo de él?

- No no se nada,- su voz cambio como si, algo no fuera bien-

- Laura a mi no me engañas.

- Bueno, no sé nada de él, ha dejado nuestro grupo, Alberto tampoco sabe nada.

- No me ha llamado, sé que no iba a ser fácil, pero esperaba que se escondiera y me llamara – dije empezando a llorar-

- No debería, pero te lo cuento, ha vuelto al grupo de Sara, y sus amigas.

- No puede ser, -empecé a llorar y colgué la llamada.

Salí llorando del baño y me fui corriendo a mi cuarto.