En los últimos tiempos están floreciendo varios programas de televisión destinados a mostrar a los televidentes más exigentes cómo son distintos rincones del mundo, lo que resulta una manera muy interesante de conocer lugares fascinantes y curiosos sin moverse del sofá de casa. Abrió la veda hace ya un tiempo ese maravilloso programa de La Sexta llamado Planeta Finito, y últimamente podemos ver en La 1 y en Cuatro dos programas de corte idéntico. Parten de una idea bastante simple: se van a una ciudad del mundo y nos muestran como vive allí la gente, y si se encuentran con un grupo de españoles, más interesante aún. Hace un rato en Callejeros viajeros he podido ver como se vive en Ciudad del cabo, Sudáfrica, y mañana podré comprobar gracias a Españoles en el mundo como es la vida de nueve españoles en Panamá.
Tengo que reconocer que a mí me encantan estos programas, que me resultan muy atrayentes y bastante entretenidos. Hace ya tiempo podía ver en la tarde de los viernes de La 2 un programa fantástico llamado Planeta Solitario en el que un joven, con su mochila al hombro, me decubría el mundo entero en la pantalla del televisor. Uno de sus presentadores más curiosos se llama Ian Wright (en la foto). Su idea de hacer turismo consiste básicamente en dormir en los sitios más feos que os podáis imaginar, y si lo puede hacer al raso, mejor aún. Además se dedica a comer todo tipo de cosas que pueda encontrar en los puestos callejeros, y cuanto más haga el ganso y beba con los nativos del lugar que visite mejor aún.
Pero aparte de este curioso personaje, tenemos a varios jóvenes más que nos enseñan todo tipo de sitios con multitud de curiosidades que a lo mejor en un viaje bien organizado por una agencia nunca veríamos. He podido disfrutar con ellos de magníficos reportajes sobre Nueva York, Italia o incluso el Camino de Santiago. Si tenéis oportunidad de verlo algún día no os lo perdáis, es realmente atractivo.
En Planeta finito podíamos ver durante una hora como un personaje conocido de nuestro país recorría un destino turístico del mundo, mostrando todos sus rincones con sus peculiaridades, su historia, y recomendándonos qué ver si algún día nos animábamos a visitarlo. Todo ello estaba aderezado con una magnífica voz en off que nos iba contando con todo lujo de detalles todo lo que íbamos viendo. Algunos programas del principio de la serie me resultaron bastante raros; partían de la idea de que viésemos a algunos humoristas del país imitando a otro famoso mientras hacían el viaje, como el nefasto día en el que a Miki Nadal se le ocurrió viajar caracterizado como Julián Muñoz mientras nos mostraba las excelencias de Moscú. Afortunadamente sólo fueron unos pocos programas y enseguida se decidió cambiar la fórmula eligiendo a un famoso normal y corriente como guía turístico de lujo, con lo que la mayoría de las visitas son bastante agradables y, como digo, muy interesantes. En mi recuerdo quedan las rutas por los fiordos noruegos con Carmen Machi, por Colombia con Felisuco, por Tailandia con Paula Vázquez o por el Machu Pichu con Esther Arroyo. Ahora mismo están repitiendo toda la serie en Hogar 10, a las 3 de la tarde. Si tenéis un ratito para sentaros a verlo después de comer os lo recomiendo encarecidamente. Es una pena que no hayan hecho más temporadas. Ojala se replanteen hacer unos cuantos más, porque me encantaría ver más lugares de la mano de la voz de José Padilla
En Españoles en el mundo, copia por cierto de los programas de los canales autonómicos de Madrid y Andalucía, podemos ver a un reportero de TVE que ha quedado con unos cuantos paisanos nuestros que residen en un determinado lugar del mundo, y son ellos nuestros guías, así se improvisa otra forma más de enseñarnos cualquier rincón de la tierra. La única pega que le veo es el horario. ¿De verdad piensa el canal público que se puede captar a la audiencia poniendo un programa como éste a las doce de la noche? Estoy segura de que si cambian la hora el programa sería más exitoso. Tener a las doce de la noche más de un millón de espectadores siendo su programa menos visto es para pensarse si merece la pena ponerlo a una hora más intempestiva, y dejarse de algunas chorradas como el infumable "show" de "Flo" y Josema Yuste. Es un gran programa y se merece un horario más estelar.
Por último tenemos a Callejeros viajeros cosechando unos muy buenos resultados de audiencia el domingo por la noche, haciéndole frente a la película de La 1. La filosofía del programa es muy parecida al de su "hermano" de La 1. Los reporteros viajan a una ciudad del mundo, allí quedan con una serie de españoles residentes en esa zona, y entre todos nos enseñan cosas muy curiosas que a lo mejor no veríamos por nuestra cuenta. La única diferencia con Españoles en el mundo es que no sólo se centran exclusivamente en la vida de nuestros compatriotas, sino aprovechan para fijarse en cualquier detalle que les cuenten los nativos del lugar que vistan o cualquier viajero que se encuantren por el camino sin importar su procedencia. Es la versión internacional del Callejeros de toda la vida, sólo que en el extranjero, y al contactar con gente del sitio a dónde van, aprovechan para hacerlo también con nuestros paisanos.
Es bonito ver estos programas, considerando que hoy en día pocas cosas resultan verdaderamente interesantes en televisión. Aunque por supuesto que siempre es mucho más bonito y divertido ver estos lugares en persona, no está nada mal utilizar la imaginación como medio de transporte de vez en cuando. Imagínate un día que llegas a casa estresado/a después de un duro día de trabajo, y necesitas relajarte con algo que no sean gritos de cuatro "frikis" televisivos. Coges el mando a distancia, y te preparas para un viajecito de una hora de duración. La fórmula de estos programas es bastante sencilla y eficaz, lo que hace que te sientas atrapado casi desde el primer momento.
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