Pekín Express se despide de África

Antes de nada quiero pedir disculpas por no publicar entradas en el blog desde hace mucho, pero con los estudios no tengo tiempo de casi nada.

De todos modos, ayer Pekín Express llegó al final de su 4ª edición, y por ser una ocasión especial, he tenido que sacar tiempo de donde sea para analizar esta edición.

Nunca me cansaré de repetir que Pekín Express es el único reality decente y verdaderamente entretenido que se emite en la televisión de España.

No obstante, esta edición se ha visto algo empañada por diversos aspectos, los cuales han conseguido que sea calificada por casi todo el mundo como 'la peor edición de todas'. Yo estoy de acuerdo con esa afirmación, pero ojo, no quiere decir que por ser la peor de las 4 haya sido mala o aburrida. Para nada.

Los lastres de esta 4ª edición comienzan en el mismísimo director de carrera. No me malinterpretéis, aunque Jesús Vázquez me parezca algo 'cansino' a veces, no quiero decir que sea un mal presentador o que no sepa llevar un programa. El problema es que Pekín Express es un reality que no encaja para nada con Jesús, sobre todo al compararlo con la anterior directora de carrera: Raquel Sánchez Silva. Cuando veías a Raquel presentar PE te dabas cuenta de que de verdad lo disfrutaba, lo vivía, lo sentía. Conseguía conectar estupendamente con los concursantes y transmitir las emociones a los espectadores, cosa que no consigue Jesús, ya que, como he dicho, aunque no sea un mal presentador, el problema es que lo presenta todo igual (Da lo mismo que sea una gala de OT, un programa de Uno Para Ganar o la final de PE), y eso no puede ser, porque PE no es un programa cualquiera.

Otro de los puntos negativos ha sido el casting: No ha sido excesivamente malo, pero tampoco ha sido tan bueno como en otras ediciones. Además, las parejas más simpáticas y que mejor caían (Al menos en mi opinión) fueron eliminadas antes de la final: Ésta fue la primera edición en la que me daba igual quien ganara porque ninguna pareja finalista me caía bien. A mí me hubiera encantado una final entre Chinto/Pablo, Santiago/Javi y David/Cuqui, mis 3 parejas favoritas.

Además, esta 4ª edición cuenta con el dudoso honor de haber tenido a la pareja más odiosa y repelente de la historia de PE: Ezequiel y Mónica. Desde el primer minuto, cuando se describieron como "Barbie y Ken" supe que no iba a salir nada bueno de ellos. Y efectivamente: Su actitud fue despreciable: Racistas ("Hay que fastidiarse, dos blancos lavando el coche de un negro... esto es surrealista") y clasistas ("Paso de Pekin Express, porque con el dinero que tenemos podemos hacer este mismo viaje cuando y como nos dé la gana"). Sin duda los peores aventureros: Si eres rica y puedes hacer el viaje cuando quieras, ¿Para qué te apuntas? Además de que presumir de dinero en un programa así está totalmente fuera de lugar. Me alegré enormemente cuando los eliminaron.

El último aspecto negativo ha sido la propia ruta: Está bien cambiar de aires, pero, en mi opinión, África no tiene el mismo encanto ni la misma "magia" que los países de Asia.

De todos modos, la edición ha estado divertida a lo largo de sus habituales 13 etapas (Aunque quizá este año haya habido demasiado metraje dedicado a discusiones y rifirrafes).

PE es un buen programa, y aunque esta edición haya sido la peor, el impecable montaje, la genial banda sonora y las imaginativas pruebas habituales del programa compensan todo lo demás.

Pasaré ahora a comentar lo más breve que pueda la final de ayer:

Tras ser eliminados Inés y Pedro (Y he de reconocer que me alegré de que no ganaran ellos porque no se lo merecían) entramos en la final propiamente dicha.

Y no podía empezar con peor pie: El testarudo Jota no hizo caso de los consejos de sus compañeros y la noche anterior se cebó a cenar como si no hubiera mañana, y claro, eso pasa factura. Se levantó con una gastroenteritis leve, yendo más lento de lo habitual y retrasando a su compañero Freire, lo que le valió a las hermanas para ganar las 5 pruebas de la gymkana.

Esto supuso una enorme ventaja para ellas (Aunque al final, Freire al ir solo consiguió remontar y casi alcanzar a las sevillanas) y les sirvió para alzarse con la victoria y 25.000 euros.

No podía faltar la típica ronda de preguntas hechas por las parejas ya eliminadas de la edición, y en esta ocasión el premio era un amuleto de 10.000 euros y un viaje por la misma ruta pero en hoteles de lujo. Jota y Freire ganaron este premio (Aunque evidentemente, no pudieron canjear el amuleto).

Lo que cambió fue la prueba final, y yo eché un poco de menos las pruebas finales tradicionales: Hasta ahora siempre en la prueba final se debían ordenar los nombres o las banderas de los países que se han recorrido durante la ruta, y en esta ocasión fue sustituido por un poema de Mandela.

Igualmente, eché de menos que Raquel presentase las etapas al no poderla ver con sus coloridos vestidos con toques de la cultura de cada país en el que se celebraba la etapa. A cambio, hemos tenido a Jesús Vázquez vistiendo casi con ropa de diario a lo largo de las 13 etapas y un esmoquin blanco radiactivo en la final. Y qué queréis que os diga, yo me quedo con Raquel y su memorable "Arrrrrrrranca Pekín Express"

También es destacable que en esta edición las palabras ganadas en las pruebas sí servían de verdadera ayuda, no como las llaves de la anterior edición que como expliqué en su momento (En una de las primeras entradas de este mismo blog) no sirvieron para nada.

Para acabar, comentar que a pesar de todo, el magnífico escenario elegido para celebrar la final y la banda sonora siguen consiguiendo que la final de PE se convierta en algo épico y difícil de olvidar para los que seguimos el programa.

"Por muy largo y duro que sea cualquier viaje, todos empiezan igual: Con un pequeño paso"

Así se despedía Jesús Vázquez de su primera (Y esperemos que última) edición de PE, concluyendo con un "Puede que nos veamos pronto", lo cual espero que sea verdad, ya que aunque no me guste Jesús para presentar PE, prefiero que haya más ediciones presentadas por él a que no renueven el programa y no vuelva nunca.

Ojalá en Septiembre de 2012 volvamos a oír eso de "Arranca Pekín Express", sea en el país que sea.