Mueren las palmeras y renace Aguasantas

Está claro que esta noche la casa de Gran Hermano VIP cambiará por completo. Primero, porque entraran nuevos concursantes y eso siempre lo cambia todo, y segundo, porque por fin veremos de que lado están los concursantes en la batalla campal protagonizada por Ares e Ylenia. Junto a ese frente, hay otro de suma importancia, que es la batalla entre Belén, Víctor y Agusantas, un trio que en estos momentos se disputa el favor de Israel.

El torero se encuentra en una gran encrucijada, ya que empezaba a tener sentimientos por Aguasantas, relación que no ha terminado de cuajar por la intrusión de los dos colaboradores de Sálvame; una pena para los seguidores del formato y para la propia Agusantas, que cada vez lleva peor la distancia entre ella e Israel. Es por esto muy posible que la ex nuera de Raquel Bollo nomine al peso pesado de esta edición, Belén Esteban. Esta última ha cazado al torero llevándoselo a su terreno, siendo algo egoísta con Santi; aunque a decir verdad, no se le puede echar la culpa a Belén. Quizás debería tener algo más de personalidad Israel y hacer lo que le venga en gana; aunque probablemente ya lo este haciendo. Él es consciente del gran público que arrastra la Esteban y de que está en un juego; es posible que prefiera renunciar a una historia de amor si con eso se asegura opciones de llegar al final.

La verdad es que a Aguasantas motivos no le faltan para estar cabreada. Los cambios de opinión de Belén son drásticos y radicales. Hace una semana ella misma decía que no nominaría a Santi aunque Raquel Bollo se disgustase. La relación entre ambas concursantes siempre se ha caracterizado por la comprensión y el buen rollo; resulta extraño pues, que Belén se haya obsesionado con la idea de poner en el disparadero a esta última. Son muchos los que dicen que Aguasantas es el concursante mueble de esta edición; nada más lejos de la realidad. Los que seguimos el canal veinticuatro horas de Gran Hermano podemos ver como la participante es una pieza fundamental para el equilibrio de los dos grupos de la casa. Será ella quien determine con sus puntos la posible nominación de Belén. Ayer por la tarde, Ares y la gitanita mantuvieron una interesante conversación, donde ambas discutieron sobre el reparto de sus puntos. Está claro que aunque estén en minoría, si decidieran invertir sus dos puntos en una única concursante conseguirían con casi total seguridad que esta subiera a la lista definitiva de los nominados, produciéndose así un absoluto caos para los espectadores, ya que la expulsión se jugaría entre dos participantes con bastantes detractores fuera de la casa: Belén y Ares. El tercero en discordia quedaría completamente fuera de peligro, pues serían las dos primeras las que acapararían la intención de voto del público.

Y es que si Belén cuenta aun con posibilidades de salvarse de la nominación, no ocurre lo mismo con Ares. Esta última ha sido descubierta por todos sus compañeros, aunque Aguasantas haya decidido seguir de su lado por propio interés de cara a las nominaciones. Ha sido Ylenia la que sin ningún temor le ha dicho a Ares lo que muchos venían pensando. Es evidente que las formas que ha empleado la exconcursante de Gandía Shore no han sido las mejores, aunque es normal que Ylenia no emplee un buen vocabulario cuando su contrincante no duda en calificarla de pornochacha y de choni entre otras lindezas.

Lo cierto es que Ylenia tiene un serio problema. La concursante habla para después no acordarse de lo que dice. Le ocurrió con Olvido, insultándola gravemente para reconocer al día siguiente no recordar los improperios que salieron por su boca. Lo mismo le pasó con Coman. La segunda semana de concurso se refirió a este llamándole Mowli, nombre del protagonista del clásico de Walt Disney, El libro de la selva; horas después le pidió perdón entre lagrimas. El inconveniente máximo de Ylenia es su falta de memoria afectándole directamente pues es este defecto es el que empuja a la concursante a decir cosas bastante sucias que luego Ares utiliza en su beneficio para excusar sus malas artes. Es licita esta estrategia de Ares y más cuando su rival se lo pone tan en bandeja; otra cosa muy distinta es que la reportera logre limpiar toda la mierda esparcida durante casi un mes escondiéndose detrás del mal vocabulario de Ylenia. He dicho que malas artes las de Ares, porque a pesar de haberse visto casi sola en esa casa tras ser descubierta por sus compañeros, lejos de reflexionar y pedir perdón, ha continuado la concursante manifestando sus oscuras intenciones. Le comentaba ayer Ares a Aguasantas su deseo de pillar a solas a Fede para poder hablar con él. No creo que su intención fuera otra que la de seguir provocando a Ylenia para que esta última reaccione de forma violenta y se gane la expulsión disciplinaria. Cualquiera diría que soy bastante retorcido, pero si barajo esta posibilidad es justamente porque el martes, la propia Ares le comentaba a Aguasantas la posibilidad de que Ylenia fuera expulsada por la dirección del programa por agresión verbal. A parte de mala leche, Ares demostró terrible torpeza y una falta de memoria equiparable a la de Ylenia, pues parece ser que no se acuerda la reportera de aquella selfie con corte de manga incluido que se hizo al lado de Olvido Hormigos durante aquella noche que es preferible olvidar. No creo que el vocabulario de Ylenia sea más grave que aquella acción llevada a cabo por Ares, la verdad.

Otra trama que ha dado un giro por completo es la de la relación entre Víctor Sandoval y Coman. Cuando parecía que ambos concursantes no iban a poder convivir civilizadamente los próximos meses, van los dos y nos sorprenden agradablemente tirando por tierra esta teoría. Es cierto que Víctor ha confesado que Coman será su eterno nominado, aunque también ha aclarado no tener ganas de más polémicas con él; de hecho, ambos han permanecido juntos en el infierno y han compartido risas, demostrando ser dos personas adultas con los pies en la tierra. Gana en este aspecto Víctor un poco de credibilidad, pues sus últimos ataques de histerismo no están justificados, al igual que tampoco han sido comprensibles los últimos insultos de Coman a Victor, llamándole viejo y calvorota. Ambos se han comportado como dos niños cabreados en un patio de colegio. Solo espero que cuando salgan de la casa, sepan pedirse disculpas porque tanto uno como otro se han dicho cosas desagradables, demostrando una gran inmadurez.