Resulta paradójico ver a muchos amantes de este programa cometiendo los mismos errores. De nada sirve fomentar un hashtag determinado en
twitter si no se vota oficialmente; por poner un ejemplo reciente, recuerdo como el jueves de la final de
Gran Hermano quince,
#GanarAlejandra fue tendencia durante veinticuatro horas, pero la realidad es que
Paula fue la ganadora con un aplastante 70,9 por ciento de los votos. Deberían pues,
todos aquellos que deseen ver a Olvido salvada esta noche,
votar a su claro rival:
Israel. La verdad es que me sigue complaciendo observar a los seguidores de
GH quejándose en las redes sociales,
pues no es más que una clara señal que apunta a la enorme pasión que despierta este formato. Da igual que sean anónimos o famosos, porque la audiencia sigue siendo la misma, al menos la parte que en cada ocasión se cita en la red para mostrar sus filias y fobias.
He de reconocer que para nada estoy de acuerdo con que algunos usuarios hagan uso del termino acoso para defender a un concursante determinado,
Olvido en este caso. No podemos recriminarle por poner un ejemplo, a
Belén Esteban que sobrepase los limites de este juego al tomárselo todo tan a pecho si luego nosotros perdemos la noción de la realidad abandonando la idea de que estamos dentro de un juego, independientemente de la complejidad del mismo.
Olvido Hormigos sabía a lo que se enfrentaba cuando decidió entrar en este concurso. Era consciente de que competiría con Belén Esteban, uno de los personajes más queridos de nuestro país, por lo que le debió resultar complicado vislumbrar el presente que ahora le está tocando vivir dentro de la casa, que no son más que cuatro niñatadas cometidas desde la más absoluta inmadurez de quien las provoca. Y es que no me puedo tomar en serio a concursantes como Ylenia o Ares, ambas totalmente contradictorias. La primera no se corta ni un pelo en insultar gravemente a Olvido e incluso a la propia Ares para después ponerse a llorar desconsoladamente y pedir perdón por ello; mientras que la segunda se esfuerza por mostrarle a la cámara una coherencia inexistente, pues ésta desaparece desde que después de ir detrás de Olvido para solucionar un asunto determinado con ella te sientas al lado de su cama y te haces un selfie haciéndole un corte de manga mientras duerme. Deberían Ares e Ylenia recapacitar sobre sus actos. La primera porque ya tiene edad para controlar las sandeces que suelta por la boca y la segunda porque a estas alturas de la película, no hay concursante de Gran Hermano que le venda la moto a la audiencia.
Con Olvido pasa lo mismo. Todos somos conscientes de que si sale esta noche, la exconcejala habrá ganado apoyos en el exterior, e intuimos que ella también lo deduce. No es que se este aprovechando de que sus compañeros estén siendo tan torpes con ella, ya que son ellos los que le están poniendo a Olvido encima de la mensa todas las cartas para quedar como la menos mala de esta edición. Posiblemente sea tarde para Olvido dentro del juego, pero si logra salvarse de la nominación es muy posible que todos los que han sido participes del complot orquestado por Ares, Ylenia y compañía se echen a temblar y cambien radicalmente de actitud. Lo mismo ocurre con Coman, concursante que me recuerda especialmente a Dayron, amigo de Pepe en GH7. Resulta bastante denigrante que Sandro Rey le acuse de estar invocando a Satanás y que algunos de sus compañeros le den la razón. Deberían por su bien aprender un poco más del Adán de ghvip pues hasta el momento es el concursante que más empatía ha mostrado con los demás y aun no le he visto faltar el respeto a ninguno de sus compañeros. Es verdaderamente lamentable que al chico no le den la más mínima oportunidad, pues desde el cuarto día de convivencia ya le estaban colgando el San benito de querer llamar la atención a toda costa, como si alguno de ellos se hubiera hecho conocido en televisión por ser discreto, ¡válgame Dios!.
Tras la expulsión de esta noche, asistiremos a una nueva e intensa ronda de nominaciones.
Es muy probable que Belén Esteban caiga en la cuenta que su peor enemiga dentro de la casa no es Olvido como piensa,
pues las que supuestamente son sus incondicionales planean nominarla en bloque. No censuro para nada que los concursantes de
Gran Hermano estructuren sus estrategias, faltaría más. Es toda una delicia gozar mientras uno observa su torpeza, y es que me resulta increíble que muchos de ellos aun no sepan que en
Gran Hermano son tres los concursantes nominados a no ser que el súper diga lo contrario, como ha ocurrido en otras ocasiones.
Lo que está claro es que esta noche tenemos una cita obligada en Telecinco, porque no dudo que se avecina una divertida tormenta, al menos para nosotros que lo vemos detrás de la barrera.