Coman se dirige al pueblo, y a mi me hierve la sangre

La incoherencia más absoluta sigue estando presente en esta edición de Gran Hermano VIP. Ahora es Coman el mayor responsable de esa ridícula campaña que nos está haciendo tragar, como si el concursante fuera candidato a las próximas elecciones generales. Coman no duda en dirigirse a un pueblo exigiendo justicia, y para que esto suceda de tal forma, las fichas de este juego deben ser movidas a su gusto. Sus argumentos no son validos de ninguna manera, y es que Coman nos pide que expulsemos a Ylenia por ser bajo su punto de vista, la concursante que ha hecho verdaderamente daño dentro de la casa y la que menos se adapta al grupo. Lo último es la repanocha si tenemos en cuenta que Coman no logró cuajar dentro de la casa durante las dos primeras semanas. Sufre mucho el vasco al ver a Ylenia salvándose una y otra vez de la expulsión, tanto es así que se ha propuesto ser la voz cantante del bando formado por las nuevas y por Aguasantas. Coman no tiene problemas en malmeter entre Ylenia y Santi, eso si, siempre con la educación que él reivindica y que yo me paso por zona sur. Resulta que Ylenia es malísima por celebrar la salvación de Belén Esteban tras perder a Víctor y a Israel, dos miembros de su grupo. Debería haber estado de luto la de Benidorm para que Aguasantas hubiera terminado contenta y así ser respetada por Coman y sus amigos, tan perfectos estos últimos.

Coman no duda en acudir al confesionario para darle a la audiencia clases mediante una moralina barata que no hay por donde cogerla. Resulta que ahora tenemos que comprar su juego; un espectáculo basado en hacer tonterías nada espontáneas durante las nominaciones y en poner orden y falsa cordura entre sus compañeros.

La única verdad es que Coman pretendía seguir jugando en ambos grupos, pero no esperaba que Ares fuera expulsada. Bueno, en realidad lo que no esperaba era que Ylenia fuera salvada. Es este último punto el que se niega a encajar y lo que ha determinado que se haya posicionado de una vez por todas; cosa que no le ha venido del todo mal, y es que gracias a su implicación para con las chirlas, Coman puede meterle algo de mano a Chari. Lo que empezó como una broma por parte de ambos, ha terminado en un mal entendido que Chari ha tenido que aclarar con él. Resumiendo: la exconcursante de Gran Hermano 12 y de El reencuentro, no está dispuesta a soportar el sobeteo de este concursante que afirmaba hace casi dos meses no participar en juegos sexuales ni mantener relaciones sin conocer profundamente a la chica en cuestión. Se ve que Coman ha tenido tiempo para aprenderse la vida y las aspiraciones de Chari en cuatro semanas. Y es que ya lo dije hace varios días: Coman es el gran lastre de Chari en este concurso. Independientemente de que la ex novia de Rubén forme parte de un grupo que no me despierta bastante simpatía, reconozco que está jugando maravillosamente bien por lo que es merecedora de llegar a la final; pero si no sabe frenar a Coman, es probable que cave su propia tumba como concursante. No debería ser tan generosa regalándole al maestro del pueblo dosis de protagonismo que poco le benefician a ella.

Luego tenemos a Ángela Portero, esa concursante que pensó que entraba en masterchef y no en Gran Hermano. A parte de la cocina, a Ángela se le da de maravilla chismosear de sus compañeros. Tiene gracia que la periodista se queje por haber recibido puntos por parte de Belén en las nominaciones cuando luego la vemos consolando a la de Paracuellos para minutos después hablar pestes de ella junto a Aguasantas en el baño; pero claro, Ángela es muy buena, le sobra educación y siempre está atenta a los gustos culinarios de los habitantes de la casa.

Y a Aguasantas se le van a agotar las lagrimas de tanto llorar. Parece que, más que en un reality se encuentre la concursante en un eterno funeral donde resulta imposible pasar más tiempo. Todo le afecta, y es que como iba a ser de otra manera, con lo inocente y sensible que es Santi. Ella no había visto nunca Gran Hermano y tampoco sabía lo que era estar en un plató de televisión frente a cinco colaboradores que no paran de preguntarte sobre tu vida. Para ella, todo es nuevo y en consecuencia, todo le impacta. ¡Pobre Santi, que mal se lo está haciendo pasar Ylenia!. Suerte que tiene a su líder, Coman, para recibir consejos y halagos, y sobre todo, para empaparse de esperanzas ante la bondad de la audiencia. Una audiencia que debe castigar rápidamente a dos malas personas que chillan y comen con la boca abierta.

Sobre el tercer grado de Ares, decir que me pareció ver más a la Ares reportera que a la Ares concursante. Esas contestaciones del palo: eso ya me lo ha preguntado Jordi, o dime algo nuevo que no sepa, pues como que sobran bastante. No creo que a ella le hubiera gustado que ningún concursante de Gran Hermano 15 le hubiera contestado de esa manera, pero allá cada cual.