Ayer no se produjo el famoso ''sorpasso''.
Chari acumuló un 65 por ciento de los votos frente al 35 que obtuvo
Belén Esteban. La expulsión de la gaditana demostró que la audiencia de esta edición de
Gran Hermano VIP actúa de manera diferente a temporadas anteriores al eliminar a componentes de ambos grupos. Podemos decir pues, que los espectadores están votando basándose en la figura del
concursante individual independientemente del grupo al que este pertenezca.
Esperaba la expulsión de Chari. Su acercamiento a Coman es probablemente el motivo que ha empujado a los votantes a lanzarse al teléfono y decantarse por esta concursante. Estoy convencido de que en el caso de que hubiera Coman y no Chari la nominada, la decisión hubiera sido diferente, pero el destino ha querido que solo se expusiera una cara de la moneda.
Chari ha sido una buena concursante. Entró con ganas y nunca ha fallado a ninguno de sus compañeros. Ha sido quizás,
la que más empeño ha puesto en las pruebas semanales y también ha sido ejemplar respecto a la convivencia.
Chari ha sido tolerante y siempre ha respetado a sus rivales, aunque no congeniara con ellos.
Demostró anoche gran elegancia al saber perder en el duelo contra Belén, y terminó de cautivar durante la entrevista que le hizo
Jordi González. Ninguno de sus excompañeros pudo rebatirle nada a
Chari, y es que probablemente, la gaditana
ha sido hasta el momento,
la concursante que mejor ha argumentado los motivos que le han llevado a actuar de diversas maneras dentro de la casa.
Tras la eliminación, los concursantes nominaron por última vez y lo hicieron de la siguiente forma:
Coman: 2 puntos a Fede y 1 punto a Ángela
Ángela: 2 puntos a Aguasantas y 1 punto a Fede
Fede: 2 puntos a Coman y 1 punto a Ángela
Belén: 2 puntos a Ángela y 1 punto a Aguasantas
Aguasantas: 2 puntos a Belén y 1 punto a Fede
Nominados definitivos: Aguasantas, Fede y Ángela
Llama la atención especialmente la nominación de
Aguasantas. La concursante fue fiel a las puntuaciones dadas durante las últimas semanas, aunque no fue nada consecuente si tenemos en cuenta sus conversaciones con
Coman durante estos días. Ambos coinciden en su deseo de ver a
Belén como finalista y de llegar junto a ella a la final, pero
Aguasantas nominó a Belén mostrando una incoherencia supina. Minutos después se excusaba alegando una supuesta solidaridad para con su compañera
Ángela, ya que esta última había perdido a su amiga
Chari. Este discurso de
Aguasantas me lo creería si estuviéramos en la segunda o en la tercera semana de concurso; pero cuando se trata de las últimas nominaciones siendo
Santi son consciente de ello, pues como no me lo trago. Que
Aguasantas aproveche su última oportunidad de nominar para quitarse a una rival dura como
Belén del medio es totalmente lícito. Lo que no es tan gracioso es que nos la intente colar con una excusa tan poco creíble.
Ángela sí nominó a Aguasantas y lo hizo con una razón de peso. A la periodista no le ha gustado ni un pelo el acercamiento entre Belén y Santi durante los últimos días. Su nominación es claramente una venganza en toda regla. Ángela pretende morir matando, y eso es algo que me resulta atractivo.
Ángela es de de los tres nominados, la que más juego ha dado dentro de esa casa. Ya dije hace unos días que tanto
Fede como
Aguasantas han jugado desde la sombra. El primero detrás de
Ylenia y esta segunda de
Ares y ahora de
Coman.
Ángela Portero en cambio,
siempre ha ido de frente,
incluso a la hora de meter mierda,
que es algo que se le da de maravilla. Además, ella cuenta con algo a su favor:
sí Belén Esteban sigue repitiendo ese estúpido discurso que dice que un reserva no merece llegar a la final,
logrará Ángela superar esta nominación sin problemas.
Supongo que la semana que viene, tras la última expulsión, se abrirán los teléfonos para votar en positivo. Belén ha superado pues esa barrera que separa a sus detractores de sus seguidores. Se le tiene que torcer mucho el concurso para que finalmente no se convierta en la ganadora de esta edición.