Es más que probable que la audiencia tenga que volver a soportar las malas caras de Laura. Si yo fuera Makoke, me prepararía para lo que está por llegar. No me cabe ninguna duda en que la hija de Kiko volverá a destapar la caja de pandora cuando vea esta noche a Javier entrar por la puerta, aunque ese hecho puede no darse si es ella la expulsada. La expulsión de hoy es cosa de dos, y a decir verdad creo que mucho deben cambiar las cosas para que esas dos personas no sean Alejandro y Rosa Benito.
Estamos más que acostumbrados a leer y escuchar comentarios que inciden en el poco juego que
Rosa ha dado en este concurso. Creo que el argumento es erróneo, pues es indudable que madre de Chayo ha dado mucho más contenido que algunos de sus compañeros. El caso es que no ha dado lo esperado.
La audiencia quería escuchar a Rosa hablar sobre su ausencia en Sálvame y sobre su relación actual con Amador. También quería el público que Benito se defendiera de los argumentos que durante meses has utilizado sus compañeros de programa para atacarla a ella y a su hija, pero Rosa no ha hecho nada de que los espectadores ansiaban. En vez de eso, se ha dedicado a ir de amiguísima de
Raquel y a adoptar el rol de madre del grupo. Un papel que sinceramente no ha gustado y que ha intentado finalizar demasiado tarde. A pesar de todo, es indudable el hecho de que Rosa puede salvarse esta noche; los porcentajes ciegos que el programa ha venido mostrando durante los últimos días así lo indican. Son dos los que están en peligro y los últimos minutos de votación serán clave para la suerte de uno de los nominados.
Si Rosa se queda, será interesante observar la reacción de Carlos Lozano. Tengo dicho que este concursante vale oro, pero existe un riesgo evidente a que el presentador fastidie su brillante paso por la casa si pierde esa humildad que resulta indispensable para todo buen concursante que se precie. La expulsión de Rosa puede contribuir a que eso suceda si Carlos no sabe torear bien la situación, mientras que si por el contrario se salva, puede valerle ese hecho al presentador para calmar su actitud y seguir jugando igual de bien.
Alejandro es el otro nominado en situación critica. Hay que reconocerle el merito del espíritu de lucha al míster. El concursante ha mantenido una actitud ejemplar al mantener tan bien el tipo tras escuchar varias despedidas agridulces por parte de los ya expulsados. El míster ha sido injustamente tratado, hecho que ha provocado que muchos de sus compañeros desconfiaran de él. Cierto es que él también ha contribuido a que esto ocurriera por jugar en varios bandos, pero creo que l
a actitud de la mayoría ha sido totalmente desproporcionada si analizamos con objetividad lo que ha hecho Alejandro dentro de esa casa. También es de ley reconocer que este concursante ha dado muchísimo más que otros que contaban con una repercusión mucho más contundente.
Alejandro forma parte de ese grupo de participantes menos conocido pero eso no le ha impedido convertirse en uno de los protagonistas absolutos de esta edición, muy por delante de otros con mucha más fama como
Raquel Bollo y la misma
Rosa Benito; creo que son motivos más que suficientes para logre superar a su rival esta noche.
No quiero terminar este post sin subrayar un hecho que ocurrió el pasado martes y que me dejó helado. Conseguía Belén el privilegio de nominar a alguien directamente por haber corrido más que el resto de sus compañeros. Al lograrlo, dijo que ella no quería ese ''marrón'' de nominar. No tengo mucho más que decir salvo que me parece una vergüenza de concursante.