"AISLADO" LA TRAVESÍA QUE CAMBIÓ LA VIDA A QUICO TARONJÍ.

Periodista y aventurero a igualdad de condiciones, el presentador y capitán de yate santanderino Quico Taronjí, se enfrentó a la travesía que marcaría un antes y un después en su vida. A bordo de un Kayak Trimarán de 5 metros y medio de eslora zarpó en solitario desde Sotogrande a Estambul, con la intención de lograr un récord del mundo en mar abierto a bordo de una pequeña embarcación sin motor, que sólo funciona a pedales, remo o vela, pasando por seis países: España, Italia, Túnez, Malta, Grecia y Turquía.rn rnrn

Quico, lo que parecía una travesía perfecta, propia de un gran deportista preparado para conseguir un récord Guinness, acabó convirtiéndose en "Aislado", una lucha a contrarreloj por la supervivencia, cuéntanos Quico, ¿qué es lo que persigue un hombre que decide embarcarse en la que sin duda será la aventura que marcará su vida?

Lo que yo perseguí era para mí una necesidad: decidí seguir, por encima de todas las cosas, lo que llamamos anhelo del alma. El mío: echarme al mar con lo puesto y llevar mi cuerpo y mi mente a unos límites, en principio figurados. Esto, que dicho así puede sonar como sacado de un artículo de Paulo Coelho, en realidad tiene todo el fundamento del mundo. Opté por salir de mi zona de confort y aventurarme en esa zona mágica en la que uno se arriesga para conocerse mejor, saber de qué pasta está hecho, crecer, madurar, y mejorar... Y, sin duda, el proyecto "Aislado" marca un antes y un después en mi vida. Es un auténtico rito de paso, con mayúsculas.

Como si fuera una película de las que te mantienen pegado al sillón, consigues llegar a tierra firme y una vez allí, ¿cómo sobrevives?

Después de tocar la costa lo primero que hice fue tirarme sobre la arena con los brazos en cruz, dar gracias a Dios, y respirar profundamente, como recordándome a mí mismo que estaba vivo, que estaba realmente vivo. Enseguida me quité el traje y toda la ropa que llevaba debajo, me quedé desnudo sobre la arena, y escurrí a conciencia cada prenda. Me volví a vestir presionando con fuerza una contra otra para evitar las películas de aire, cavé un enorme agujero en la arena, y me enterré cubriéndome hasta el cuello. Metí la cabeza entre el chaleco salvavidas para descansar y protegerme la cara de los aguaceros, que eran constantes y muy violentos.

Pensaste en algún momento, ¿hasta aquí he llegado?

Nunca. En tierra (después de lo ocurrido en el mar) ya me sentía a salvo a pesar del riesgo real de una hipotermia. En el mar sí que pasé momentos extraordinariamente peligrosos, pero siempre tuve claro que haciendo bien las cosas salvaría el pellejo. El optimismo, la confianza en ti, y la fe son las mejores armas. Siempre lo digo, porque realmente la actitud positiva es algo que sí depende totalmente de uno mismo. Con la actitud, con la disposición de ánimo y la fe no se negocia, deben ser irrenunciables. Todo lo demás son los problemas, que están ahí, delante, y que hay que ir solucionando. A la muerte no hay que darle alas, hay que dejar que haga su trabajo mientras nosotros hacemos el nuestro. Pero tenemos una ventaja: nosotros podemos motivarnos, ella, sin embargo, está aburrida de hacer siempre lo mismo. No se esfuerza demasiado.

Han pasado ya dos años de tu aventura y decides que es el momento de compartir tu experiencia, es por ello que te sientas a escribir un relato apasionante que sin duda "hace grande a un hombre en medio del mar". Cuéntanos cómo reviviste todo lo sucedido para escribir magistralmente "Aislado".

Cuando volví a Madrid después del naufragio, necesité un tiempo para aterrizar mentalmente, volver a mi día a día..., la gente hablaba conmigo y yo continuaba en mi mundo, incluso en ocasiones, me tiraba media hora hablando por teléfono y cuando colgaba, me preguntaba a mí mismo ¿quién era?, ¿qué me ha contado?.

Una vez asentado, comencé a escribir mi aventura sin más pretensiones. Yo creo que lo hacía más por terapia que por otra cosa, pero según fui avanzando en la escritura empecé a sentir intensamente: motivaciones de mi viaje, sentimientos, reflexiones, anécdotas, momentos extraordinarios, únicos, increíbles... De pronto sentí que no contar mi aventura de cabo a rabo sería imperdonable. Reparé en que "Aislado" realmente podría ayudar a muchísimas personas, podría impulsar a mucha gente a poner en marcha sus sueños, y, de verdad, me dije que sería muy injusto conmigo y con los demás si no plasmaba en un libro tanta emoción, una experiencia así de brutal y salvaje, y la daba a conocer. En el fondo fue una cuestión de justicia y de necesidad.

Sin duda, tu naufragio ha marcado un antes y un después en tu forma de ver y vivir la vida, ¿con la publicación de tu libro, que valores quieres transmitir?.

Cuando uno siente verdadera pasión por algo, se puede entregar sin condiciones y emprender sin límites. La pasión nos impulsa. Con mucho esfuerzo y sacrificio, con fe, con tesón, con alegría, y con fuerza, los resultados llegan: la recompensa llega. El éxito está, en gran parte, en la consecución de aquello que nos hace felices. Y el pasaporte hacia esa felicidad lleva un sello impreso bien clarito en la primera página: pasión. "Aislado" es un libro escrito desde la más absoluta pasión. Olga Marset, que es de las mejores periodistas que yo conozco, se lo leyó entero en un solo día, me iba mandando whatsapp cada dos o tres horas, al final me llamó y me dijo: ¿sabes? me ha encantado, es un libro escrito desde la más absoluta pasión y sinceridad. Y eso es cierto: "Aislado" lleva la verdad por bandera. En él me desnudo desde la primera página. Nunca me expuesto tanto a nadie como lo he hecho escribiendo este libro.

Una vez rescatado, y que ya piensas vuelvo a casa sano y salvo, tienes otro percance, esta vez un robo ¿no?, ¿cómo fue?.

Bueno, estaba intentando dormir, enterrado en la arena, cuando dos tipos vestidos de militares desvalijaron el casco de la embarcación que las olas llevaron hasta la costa. Cuando me levanté, al clarear el día, observé a los dos hombres y fui a pedirles ayuda. En esos momentos yo no tenía ni idea del robo. Les sorprendí, y echaron a correr; solo entonces descubrí que habían vaciado el casco del kayak llevándose las pocas pertenencias que me quedaban: algo de dinero, mis documentos. Se lo llevaron todo, hasta los churros flotadores de los chinos que viajaban dentro del casco para aumentar la flotabilidad de la embarcación. ¡Para qué narices los querrían! En fin, en su huida arrojaron mi pasaporte a la arena, y fue lo único que recuperé.

Tengo muchas cosas que contarles a mis nietos.

"AISLADO" ya se puede adquirir en diversas plataformas pero su presentación oficial será el 12 de Mayo a las 19:00h en la Agencia de Viajes Pangea (C/ Príncipe de Vergara 26).

Muchas gracias Quico y te deseamos mucha suerte con tu libro y en todos los proyectos que comiences.

@ANGEL_PIZARRO