'Nikita' llega para salvar el mundo... y a The CW

'Nikita' representaba el 50% de los estrenos de "The CW" para esta temporada, por lo que las expectativas sobre su aceptación eran altas. La serie, como su protagonista, ha salido airosa y ha logrado más 3,5 millones de espectadores, superando, aunque sea por poco, a su lead-in, 'The Vampire Diaries'. Un hito para tratarse de la cadena sobre la que siempre pesa el halo de una inminente desaparición del panorama televisivo americano. Ésta audiencia, junto con él relativo éxito de 'Hellcats', le da a la cadena unas nuevas alas con las que intentar sobrevivir hasta los siguientes upfronts.

¿Se corresponde la calidad del capítulo con la audiencia que ha obtenido para el canal en el que se emite? Desde luego. El público joven y femenino de "The CW" empezaba a cansarse de tanta historia de niños pijos y guapos que no llevaban a ningún lado y ha mostrado una clara preferencia series que siguen siendo carne de cañón de los "Teen Choice Awards", pero que presentan un carácter más dinámico, con una ambientación más ambiciosa y personajes algo más trabajados. Para una cadena de televisión de estas características, 'Nikita' colma con creces todas las aspiraciones de los desesperados programadores, que entre repetición y repetición en su parilla, tienen que intentar retener a su público para que no huya despavorido.

Nikita, tan guapa como inteligente

La serie gira totalmente en torno a Nikita, absoluta protagonista de la serie y que está muy bien interpretado por Maggie Q. La protagonista tiene muchas cualidades que hacen de ella un buen personaje principal: fría, metódica, sensual, inteligente, sensible y violenta. Tiene momentos buenos tanto en los registros de acción y de lucha como en escenas dramáticas. La secuencia en la que visita la tumba de su prometido es uno de los mejores momentos del capítulo y un estilo que se debería explotar más y reducir así un poco los puñetazos, huesos rotos y sangre a chorros. Aunque está claro que veremos mucho más de lo segundo que de lo primero.

A lo largo del episodio conocemos su motivación, la razón por la que quiere derribar a la división secreta que la convirtió en una asesina profesional. Enamorarse fue su fallo, según Nikita. Para la organización, su crimen es la traición y tiene que pagarlo con su vida. Para evitar que su relación interfiriese en tan letal profesión, matan a su prometido y ella jura venganza. Este enfrentamiento perfectamente delimitado del lado bueno y el lado malo, posiciona al espectador que, sin salida, se pone del lado de la espía más sexy de la televisión actual. Al principio parece que Nikita trabaja sola, pero tiene demasiada información sobre todos los asesinatos que plantea la organización secreta. ¿Cómo puede la trama hacerse más interesante? Alex (Lindsay Fonseca), una joven a la que captan nada más comenzar el capítulo para convertirla en una asesina al servicio de la división, es cómplice de Nikita y, gracias a ella, la espía tiene ojos en la casa de su enemigo. El motivo de ésta conexión es desconocido, por lo que tienen un buena trama horizontal para desarrollar durante la primera temporada. Sin duda se tratará de una razón lo suficientemente fuerte como para que una de ellas quiera estar encerrada en un campamento militar especializado en crear asesinos despiadados; eso sí, con un fuerte carácter erótico. Los personajes secundarios, la mayoría miembros de la organización mafiosa, tienen un perfil más monótono y estereotipado, salvo Michael (Shane West) que fue quién entrenó a Nikita y que ahora hace lo propio con Alex. La sugerencia de un triángulo amoroso entre él, Nikita y su prometido hace más intenso a este personaje, que es el nuevo encargado de poner en marcha todos los recursos de la división para aniquilarla.

El piloto tiene ritmo, las tramas están muy bien conectadas (especialmente la escena de los asesinos con la máscara) y con cuarenta minutos han sabido contar muchas cosas. No tiene complicaciones de comprensión y es un producto muy asimilable y que, si la serie sigue el camino trazado en el piloto, contará con el respaldo del público. Una carencia que hubiese dado más entidad al capítulo son los pocos flashbacks sobre el pasado de Nikita en la organización, como se convirtió en asesina profesional, qué relación tenía con sus miembros o en qué momento conoció a su prometido. Escenas que, con toda probabilidad, veremos en el futuro pero que alguna de ellas hubiera tenido un encaje lógico en el piloto. Otro de los problemas que pueden hacer daño al guión es el tratamiento que hagan de la persecución a Nikita. Si la capturan pronto, la serie no tiene nada que contar, si lo prolongan demasiado y no introducen elementos nuevos entre captura y captura, la trama se agota. Espero que este punto lo tengan resuelto y sepan mantener el interés a la vez que la tensión.

No he visto "The femme Nikita", la serie de los años 90 sobre la que está basada este nuevo remake, pero por lo que he podido leer se trata de una versión mejor que la anterior. A pesar de ser una serie de acción con un planteamiento simple y que la industria cultural americana ha recreado una y mil veces, tiene claros elementos diferenciadores con las marcas de la cadena, cuya fórmula de los últimos años se agota con claridad. La alarmante audiencia de la Season Premiere de 'Gossip Girl', '90210', o 'Life Unexpected' escenifican el final de un ciclo y el principio de otro. ¿Será consciente la espía Nikita de qué además de ser la salvadora del mundo lo es también de la endeble "The CW"?