Ir a FORMULATV

CAPITULO 24- HAZ UN MILAGRO OTRA VEZ...

Lunes 13 de Julio de 2015 17:55
 

NARRA VICTORIA

Lo había arreglado con Cristian, ahora tenía que ir a ver a Belén y a Héctor al hotel, ya quede con ellos de bajarnos a la cafetería que había justo debajo. Cristian iba a venir, se los iba a presentar. Quería que viera, que yo quería algo con él, pero por otra parte me parecía una provocación a Samuel, tenía miedo de verlo otra vez, lo tenía medio olvidado, pero de nuevo siento algo por él, y no debería, se había portado fatal, no sé si fue al verlo tontear con Nuria, pero a Cristian también lo amaba, como dice la canción "somos dos condenados a ser tres, somos tres condenados a ser dos". Tenía dudas, Cristian o Samuel, solo sé que este amor me va a matar o me va a volver loca.

Llegamos a la cafetería. Estaban sentados en la mesa justo de al lado de la puerta, allí no estaba Samuel, estaban todos menos Samuel, en ese momento respire aliviada, tenia pánico de que dijera algo.

- Hola, papa, belén, Hugo, e Ylenia

- - mi padre Belén, y Hugo se levantaron a darme un beso, Ylenia seguía rara conmigo- hija que guapa estás.

- Os presento a Cristian, mi novio, llevamos 1 semana y media juntos.

- - en ese momento mi padre y Belén sonrieron, se le vio contentos, y como si se hubieran quitado un peso de encima-

- Me alegro mucha por ti. –dijo Ylenia con una sonrisa falsa-

Estuvimos un buen rato hablando, a Belén se la veía más gordita, ya tenía barriguita, y ni rastro de Samuel. Ylenia fue al baño, y aproveche para irme detrás, tenía que hablar con ella. Ni me di cuenta que iba a dejar a Cristian a solas con mi padre Belén, esperaba que se pusiera a hablar con Hugo, y no le dieran mucho la lata.

- Ylenia, Ylenia, espera quiero hablar contigo, ¿Qué te pasa?

- Me parece muy fuerte lo que le has hecho, el te quería.

- Sí y yo también, el volvió con sus amigas, el tenia fotos, besándose con Sara, me han contado que volvió a las andadas con unas y con otras, ¿sabes cómo me sentía al verlo?

- Le tenías que haber dado otra oportunidad...

- Oportunidad, a que, no me llamaba, no sabía nada de él, creía que me había olvidado, además tan mal no estará, lo vi tonteando con Nuria, en mi casa, y después lo vi en la discoteca.

- Era para darte celos, el te sigue amando, te quiere, pero lo vuestro es un milagro que se arregle. No sabía que podías ser así, además estás jugando con los sentimientos de tu novio.

- No estoy jugando a nada, puede parecer raro, pero los quiero a los dos, a tu hermano lo estaba empezando a olvidar hasta que llegó.

- ¿pero a uno lo querrás más? ¿serán cariños diferentes?

- No lo sé, Ylenia, no lo sé. Además supongo que será, que mi corazón se ha hecho a que no puedo estar con él, lo nuestro es imposible.

NARRA SAMUEL.

Estaba vagando por las calles, estaba tan confundido, tan triste, no entendía nada de lo que había pasado, si pudiera echar el tiempo atrás, nos íbamos esta tarde, y pienso que lo mejor que me podía haber pasado hubiera sido no venir, le quería dar una sorpresa a Victoria, y el sorprendido fui yo, quizás me lo merecía, en el fondo era comprensible, si sabía todo lo que hice, pero estaba arrepentido.

No podía dejar de pasar la oportunidad, cogí un taxi y me plante en la casa de Victoria, tenía que hablar con ella, quería que me lo dijese, necesitaba oírlo de sus palabras, si lo afirmaba, no la molestaría más en la vida, pero si no, estaba dispuesto a luchar por ella. Cuando llegué no estaba, no había nadie, pero me iba a quedar hasta que llegara.

Necesitaba un milagro, un milagro para volver con ella, lo nuestro cada vez, era más complicado, cada vez nos ponían más cerrojos, las puertas de nuestro amor cada vez estaban más cerradas.

NARRA VICTORIA.

Me despedí de ellos, a saber cuándo nos volveríamos a ver, en navidades, ya era seguro que no, iba a podría reabrir un fuego que estuviera apagado, o una guerra.

Primero fui a dejar a Cristian en su casa, quería que entrase, pero yo no quería, necesitaba llegar a casa.

Abrí la puerta de la cancela, y justo detrás noté a alguien.

- Victoria, tenemos que hablar

- Creo que todo quedó muy claro el otro día Samuel. Yo ya no tengo que hablar contigo nada.

- Sí, me tienes que decir que no me quieres, que no me amas, que ya no sientes nada por mí, prométemelo, júramelo, dímelo mirándome a los ojos.

- - cada vez estaba más nerviosa- no te tengo que decir nada, piensa lo que quieras, ya no me importas, si quieres podemos ser amigos, pero nada más.

- Si no lo has dicho es porque todavía sientes algo por mí.

- Te equivocas, no te quiero, no te amo, no siento nada por ti.

- Tus ojos no dicen lo mismo, además, no me lo has dicho mirándome a los ojos.

- Vete, vete, rehaz tu vida, haz lo que quieras pero déjame, déjame ser feliz. – en ese momento me dio un beso, en la boca, la verdad que yo no le puse objeción-

- Me quieres me sigues amando.

- No estás equivocado no siento nada por ti, déjame – en ese momento corrí, cruce todo el jardín llorando-

Estaba tan nerviosa que no era capaz ni de abrir la puerta de mi casa, estaba llorando, lo nuestro no podía ser, no tenía ganas de nada, ¡otra vez no podía ser!

Comentarios

Necesitas ser usuario registrado de FormulaTV.com para comentar en este blog. Conéctate o haz clic aquí para registrarte

Sobre este blog...

Creado por
Archivo