La peor pesadilla de algunos de los seguidores de 'El Reencuentro 2011' se cumplió hace tres semanas con la entrada del insoportable Ivan Madrazo, ganador de Gran Hermano 10, acompañado por una supuesta enemiga y rival, que finalmente, no ha sido ni una cosa ni la otra, de hecho, por no ser, no es ni concursante, porque aparecer, lo que se dice aparecer, aparece poco.
Lejos de ofrecer una imagen divertida, humilde, y sencilla, Iván se ha anclado en ese personaje rancio, prepotente, victimista y repugnante que tanto le funcionó en su primer concurso. Vivo deseando que un día de estos, la audiencia le de la espalda y se le quede la cara de poker que todos deseamos admirar cuando Jordi le emita la noticia, tal y como sucedió, supuestamente por error, la primera semana. EL vive muy seguro de sus posibilidades, pero en esta ocasión, no está destacando. Aquí destacamos algunos detalles por los que este personaje, muy pasado de moda, que trata por todos los medios seguir en televisión, no debe seguir más en el concurso:
- Iván Madrazo se ha autodenominado como el justiciero de la casa de 'El Reencuentro' el imparte la ley, el dice, juzga y crítica lo que esta bien y lo que esta mal bajo su peculiar y particular punto de vista. Él reparte las culpas y señala con el dedo. Se dedica a sentenciar a todo aquel que no cumple con lo que a él le agrada y le beneficia.
- Iván Madrazo tacha de falsos a la primera de cambio a cualquier persona, cuando sobre él, se podría aplicar aquello de 'Dime de que presumes...' o 'Se cree el ladrón...' o también 'Ve la paja del ojo ajeno...'. Este tipo, mal intento de modelo comercial, crítica a diestro y siniestro oculto en las cuatro paredes de alguna habitación de esa casa, y cuando sus propia boquita y sus propios actos lo dejan en evidencia, lo larga todo presumiendo de sinceridad. ¡Venga, hombre, venga! Este señor solo abre la boca para rajar, rajar y rajar...no hace otra cosa...porque ni limpia, mi ordena, en las pruebas se esfuerza lo justo, no se vaya a herniar. Por no hacer, no limpia ni el rastro de excrementos que deja en la taza del baño cada vez que defeca, dicho por sus propios compañeros, que lo tachan de ser bastante guarro. Es decir, en la convivencia, pésimo.
- Iván Madrazo ha adquirido de nuevo el papel de víctima que tan bien le funciono en su GH pero parece no encajar del todo en este nuevo concurso. La imagen de pobrecito e inocente ya no lo es tanto, y ya no cuenta con los cuatro palmeros que le daban la razón en absolutamente todo (Véase la murciana Almudena, apodada Chiqui). Ahora se ha encontrado con rivales que tienen luz propia, expresión que el mismo utiliza a todas horas...y por lo tanto, más difíciles de captar. Trata de desprestigiar por todos los medios a Lara y Jorge, favoritos desde el comienzo, y él conocedor de ello, y parecía haberlo logrado, pero esta semana, las 'joyitas' han recibido de nuevo el apoyo de los que estamos aquí afuera. Eso, a Iván, le enerva.
- Iván Madrazo tiene que estar metido en todas las salsas. No importa si va o no va con él el asunto, no hay de que preocuparse, el mismo se encarga de meterse y destacar...aunque, repito, no tenga nada que ver en el problema. Él debe ser el ajo de todos los platos...que a veces tiene su gracia, pero en exceso harta y repite. No puede vivir sin gresca y expandir su estúpida filosofía de la vida, muy vivida, según parece (ahora ir de discotecas con 'Viceversos' y otros conocidos es tener la universidad de la calle).
- Iván Madrazo va, descaradamente, de ganador y superior, y a lo mejor se lleva una sorpresa. Su actitud en las galas es seria, solemne, ceremoniosa...vive con miedo a que le llueva una nominación y sus compañeros le larguen a él, y a la invisible que tiene por pareja, a la calle, de donde nunca debió salir, con esa pinta de hortera de bolera tan rancia que lleva. Por favor, saquémosle de ahí, o al menos, hagámosle caer en la lista de expulsados para que sea consciente de que no va a triunfar en esta ocasión.
- Iván Madrazo abusa de la bondad y la inocencia de Yola tratándola como una auténtica esclava. Además, sabedor de que ésta podría estar empezando a sentir algo por el ganador de GH, está empezando a aprovechar la coyuntura, porque además, conoce también que la chica de Hotel Glam es de las favoritas en el exterior, es decir, uno más uno, son dos. "Veo que no soy el favorito, pero me pego a la favorita, y doy juego, para alargar aquí mi estancia" pensará, con el lastre de su compañera, también conocida como 'el mueble'.
Fuera ya, por el amor de Dios.
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