Dándole vueltas a 'Gran Hermano 12+1'

Renovarse o morir, esa es la lección que lleva aplicando 'Gran Hermano' edición tras edición, y en el último año han sabido darle la vuelta al concurso sin dejar que sus fieles se aburran o se despisten. El espacio de Telecinco recibe continuas críticas, y algunas de ellas pueden estar en lo cierto, pero es innegable que el equipo del programa sabe mantener el reality-show fresco, sin perder su esencia, eso sí, sorprendiendo en cada edición, e incluso en cada gala.

Entre el '12+1' impulsado por la (extremadamente) supersticiosa Mercedes Milá y el último eslogan, Dale la Vuelta, 'Gran Hermano' se ha sacado una baraja entera de la manga. La intensidad y la tensión se ha mantenido hasta el final, demostrando que el reality más longevo de nuestra televisión no depende simplemente del casting, sus guionistas y los giros que no han cesado tienen mucho que ver con el éxito del formato.

Las tramas acontecidas este año en 'Gran Hermanos 12+1' se han sucedido con naturalidad, recordando levemente a las primeras ediciones. No ha sido necesario forzar desencuentros o peleas entre los concursantes, es más, este año se ha respirado una armonía que era necesaria en el concurso, era imprescindible darle la vuelta a los últimos grandes hermanos en los que los bandos, los insultos y la violencia (verbal o física) predominaban por encima de todo lo demás.

El amor (o el sexo, o llamémoslo X) es un clásico en 'Gran Hermano', y este año no podía ser menos, con tantas idas y venidas en la casa de Guadalix algún encuentro amoroso tenía que surgir. La pareja más destacada en este sentido ha sido la formada por Noemí y Alessando, aunque también han dado mucho juego María y Hugo (emulando en parte a lo que ocurrió el año pasado entre Marcelo y Laura), o tampoco podemos olvidar el "enamoramiento" de Ari, que se ha resuelto una vez fuera del concurso.

Tantas vueltas no han sentado bien a todos los espectadores, la entrada de los novios o exnovios de algunas concursantes fue un ingrediente que el programa utilizó con el único objetivo de dar espectáculo y hacer que los habitantes de la casa reaccionaran (recordando en algunos momentos a la popular saga de 'Los Juegos del Hambre' en versión light, por supuesto). Finalmente Sergio terminó entrando en el mismo juego que su novia Sindia, pero 'Gran Hermano', como otras tantas veces, ha finiquitado su relación, convirtiéndolos ahora en "enemigos íntimos", por así decirlo.

El mejor giro de todos llegó en la recta final, cuando los espectadores estaban eligiendo a los finalistas de esta edición mientras que los que se quedaban en la casa principal pensaban que cada vez estaban más cerca del ansiado maletín. El programa fue tan retorcido que llegó a preparar una falsa final en la que el más perjudicado fue Hugo.

Esa recta final fue un punto a favor de 'Gran Hermano 12+1', porque así nos ahorramos unas últimas semanas agonizantes sin nada nuevo que contar y con un número muy reducido de habitantes en la casa. También acertaron con la elección de los +1, esta vez me refiero a los concursantes nuevos que entraban cada semana a la casa, hecho que sirvió para alargar el concurso y a su vez también para agilizar la dinámica, pudiendo nominar y expulsar cada semana. La desventaja es que los que entran ya conocen cuál es la situación fuera, y en ese sentido si que se ha resquebrajado parte de la esencia del concurso.

En lo que respecta a la conductora, Mercedes Milá ha vuelto a estar sublime en cada gala, su soberbia y prepotencia son marca de la casa y sin ella todo sería diferente, puede que peor o es probable que incluso mejor, pero ella marca la diferencia. Ninguna otra presentadora se involucra tanto con su programa y sus concursantes, inevitablemente se ve muchas veces de qué pie cojea o quiénes son sus favoritos, y hasta ha llegado a tener varios enfrentamientos en plató con algunos de los exconcursantes, como es el caso de Cristian o Vero.

Esa parte del espectáculo también forma parte de 'Gran Hermano', y solo es posible gracias a su presentadora y sus involucrados concursantes. El casting este año ha sido perfecto, y por eso Telecinco no descansa y, pensando que no ha agotado del todo esta edición, vuelve a meter en la casa a todos los participantes (que quieran) de 'GH 12+1' en un nuevo experimento llamado 'La Re-Vuelta', ¿quién dijo que el reality-show por excelencia estaba acabado?

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